- Es conveniente que después de comer el bebé esté tranquilo.
- Evita los juegos y movimientos bruscos del bebé en la primera media hora tras la toma.
- Aumenta el número de tomas y disminuye la cantidad.
- Favorece la expulsión del gas, ya que es normal que los bebés traguen mucho aire mientras están siendo alimentados: después de las tomas, mantén al bebé en posición vertical unos minutos para que pueda eructar.
La regurgitación del lactante
